Mi naturópata me lo recomendó por problemas digestivos recurrentes, después de un mes, ninguna mejoría, sé que es poco tiempo pero no era eso lo que me preocupaba.
Efectivamente, al principio de la toma, sentía vitalidad, perseverancia, ánimo en mis tareas diarias y lo que más me llamaba la atención era mi organización cerebral, mis ideas en orden y mucha reactividad, también en la expresión. Con el paso de los días, al cabo de un mes, me sentía cada vez más cansada y me despertaba por la noche, lo que me provocaba ojeras, algo a lo que no estoy acostumbrada. Mi cuerpo se puso en piloto automático y era como si una parte se me escapara. Una mañana, me desperté sin ganas y fue entonces cuando lo dejé todo.
En conclusión, creo que este producto es potente y que pone de relieve nuestros puntos débiles, por lo que requiere mucha escucha y atención.