Después de un tratamiento de 3 meses con altas dosis de Chlorella (10 comprimidos 3 veces al día) ¡conseguí volver a hacer la compra! Ya no me sentía con fuerzas para hacerlo desde que padecí fibromialgia durante años.
Tengo 74 años y la Chlorella me ha dado ganas de creer que no todo ha terminado. No estoy dispuesta a dejarlo porque no me provoca ningún efecto secundario a diferencia de muchos de mis medicamentos.