Antes de 2013, no pasaba un día sin que me quejara de dolor de pies, espalda, articulaciones, hemorroides, etc….
Entonces, un día, descubrí en la red, un anuncio que hablaba de la Chlorella. Me puse en contacto con el profesor para asegurarme de la fiabilidad del producto.
Empecé a tomar 3 comprimidos, luego 6 y finalmente 9 al día. Debo admitir que el dolor desapareció y empecé a sentirme bien en mi cuerpo y en mi cabeza. Mi tránsito intestinal se normalizó. Creo que una de las cualidades de la Chlorella es depurar la sangre de todo lo que es tóxico, ¡y funciona demasiado bien! Lo recomiendo a todo el mundo, con toda sinceridad.
Muchas gracias.